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A Un Click: Lo Siento

29: PRUEBAS

AleRamirezRodriguez

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Freen y Agamous estaban conversando animadamente sobre cómo le surgió la idea a Agamous para crear el club cuando los cuatro terremotos restantes llegaron al comedor.

-¡Ay, pero que monos! — Agamous sonrió al ver como uno a uno se acercaron a Freen  para saludarla.

Cosa que fue rara para Freen, ya ellos habían bajado y la habían saludado anteriormente.

-Scimmia tuo padre. — Murmuró Kirk mientras miraba a Agamous entrecerrando los ojos.

Antes de que Freen pudiste reaccionar, Song habló.

Sabía que a Mamá Sarocha eso de "mono tu padre" no le agradaba.

-Mami, ¿Podemos ir a la piscina? — Song preguntó mientras señalaba hacia dicho lugar.

Desde el comedor se podía apreciar parte del área de la piscina, por lo que Freen asintió y llamó a Saint.

-¿Puedes estar con ellos? — Le preguntó y Seng aceptó encantado, pero luego miró hacia Agamous y volvió a poner su semblante de hombre de negro.

-Claro, Señora Chankimha de Armstrong — Pronunció y se alejó seguido por los cuatro pequeños.

-Me parece que él no es muy amigable. — Comentó Agamous mientras volvía su atención a Freen.

-Aunque no lo creas... él es muy amigable, solo que está en su trabajo. Es su labor ser así. — Explicó la Castaña quien sabía muy bien qué Seng  solo estaba siendo celoso.

-Señora Chankimha, las hermanas han llegado. — Anunció una de las empleadas encargadas de recibir a las personas.

-Bien, nuestras modelos han llegado. — Freen se puso de pie para ir a recibirlas, pero no tuvo que hacerlo.

Las hermanas entraron como si de su casa se tratase. Irin saludó de puño a la empleada, Seowl se detuvo para darle una mordida al trozo de pastel que traía en su mano y Beer se sentó en la sala.

-¡Holis! — Las hermanas de inmediato dejaron de hacer lo que hacían para acercarse y abrazar a Freen.

POV FREEN:
-¿Nos podemos sentar? — Señalé hacia la mesa del comedor donde Agamous  estaba parado mirando hacia nosotras.

-¿Qué hace el Ayuwoki aquí? — Beer se quitó las gafas para mirarlo con cara de pocos amigos y me interpuse en medio.

-Él es uno de mis patrocinadores. Fue quién me consiguió lugar en el evento. Deben comportarse. — Les sonreí.

Tenía esperanzas de que ellas podían controlarse.

-Bien, pero esto te costará más besitos. — Irin pasó hacia el comedor.

-Bien, pero si a mí Seng se le escapa un tiro... le voy a aplaudir. — Beer siguió a Irin y suspiré, Seowl era la más coherente de ellas.

-¿Me ayudas a controlarlas? — Le pregunté y Seowl sonrió.

-Mira, yo no soy de hablar. Me conoces, yo soy una tumba. Eso de mucho blah, blah, blah no va conmigo, pero te diré algo. Él ni me cae bien, ni me cae mal por lo que no voy a intervenir si Irin lo quiere traumar o si Beer lo quiere castrar con el arma de Seng. Ni mucho menos voy a intervenir si Blue llega y lo ve sentado en su... silla. Porque sabes que Blue adora sentarse justo en la silla donde él se ha sentado. Para no enrollarme más... solo queda decirte que deseo con mis más oscuros pensamientos que Blue aparezca en este instante y amarre a Agamous de la pata del helicóptero y lo mande a... literalmente... volar. Ahora, si me disculpas... iré a la mesa.

-No sé si da más miedo muda o habladora... — Murmuré mientras me acercaba a ellos.

-Solo tengo dos preguntas... ¿A qué hora y dónde? — Beer miraba fijamente a Agamous quien sólo sonreía de nervios.

-Mañana, a las seis de la tarde debemos estar allí. Hoy será para tomar ajuste en las tallas de ser necesario.

-Vale, pero que quede claro que a mí me va a quedar perfecto todo. — Irin se puso de pie y se acercó a la cocina.

-Bien, vamos a mi oficina. Allí tengo la ropa.

Me puse de pie y Agamous de inmediato también en un intento de acto caballeroso, pero no le dio tiempo.

-Chicas vayan a mi oficina, le avisaré a Seng que estaré allí. Agamous, puedes ir con ellas.

-No te preocupes, Saro. Yo te puedo esperar.

-Que te vienes con nosotras, Agamous... dejo.Irin lo tomó de un brazo y se fueron en dirección a mi oficina.

Salí para encontrarme a Song sentado en el borde de la piscina para niños y a los trillizos en una mini competencia para llegar primero hasta Tío Seng.

-Seng, estaré en mi oficina con Agamous... — Noté su mirada de pocos amigos.

-Y con las hermanas. Tu novia también vino. — Aclaré y él asintió para volver a prestarle atención a mis pequeños.

-Se portan bien, mamá va a hacer algo del trabajo. — Les avisé, pero ellos estaban concentrados en nadar y en su tío.

Abrí la puerta de mi oficina para encontrarme con la peculiar escena de las tres hermanas sentadas sobre mi escritorio mirando seriamente a Agamous, quién estaba sentado en un pequeño sofá individual.

-Es hora de poner manos a la obra. —Hablé para interrumpir las miradas acosadoras de las hermanas.

-Bien, ¿Con qué te ayudo? — Agamous se ofreció de inmediato mientras se paraba.

-Aún no entiendo que tiene que pintar aquí el tipo este. — Irin lo señaló con un bolígrafo.

-Creo que mejor...

-No, ni lo digas. Tú te quedas. — Sabía que la presión de las hermanas estaba haciendo flaquear a Agamous.

-Tengo los vestidos en mi armario. — Entré al baño de mi oficina donde tenía el armario que Becky había mandado a construir para mis creaciones.

FLASHBACK

-¿Te ayudo? — Escuché la voz de Becky mientras tomaba algunos de los diseños de prueba que había finalizado para subirlos al armario de nuestra habitación.

-Per favore — Respondí y ella se acercó a mí tomándome por la cintura.

-Me has salido italiana. — Comentó antes de darme un pequeño beso.

-No querida, lo de italiana te lo dejo a ti.

-Y lo de colombiana con toques de boricua te lo dejo a ti. — Asentí gustosamente.

-Oye, si sigues así vas a acabar con nuestro armario.

-Eres una enana exagerada. Solo son un par de pruebas.

Becky me miró mientras hacía una mueca con su boca... estaba analizando algo, apostaría por ello.

-Pero estoy segura que ya no serán par de pruebas. Te aseguro que pronto serán las piezas exclusivas de Sarocha Chankimha... — Comentó mientras se dirigía hacia el baño y la seguí con la mirada

-¡Becbec!

Me acerqué sin dudarlo, estaba con una mano dentro del bolsillo de su pantalón hecho a la medida... acto que hacía que mi vista se desviase hacia su trasero que resaltaba... y una mano en su mentón.

-¿Qué haces? — Tenía su mirada en la pared que solo era decorada por un gran mosaico.

-¿Me dejarás comprarte un local para que tengas allí todo?

-No, te dije que no. Quiero comprar lo mío con mi propio dinero.Me acerqué y la abracé por el cuello.

Becky quería ayudarme comprando una establecimiento donde yo pudiese ir a trabajar en mis diseños para comenzar con mi empresa, pero yo no quería que ella gastase más en mí y lo quería comprar por mis propios méritos.

-Bien, entonces... déjame hacerte un regalo.

-No estamos celebrando nada. — Dejé un beso en su mejilla.

-Claro que sí, hoy es... es... -Calla, sabes que no tienes excusa.

-Uhhhh, claro que sí. — Se giró rápidamente llevándome contra la pared.

-Hoy celebramos que vamos a estrenar este baño como es debido. — Sonrió.

FIN DEL FLASHBACK:

-¿Esos son? — No sabía en qué momento, pero Agamous había entrado al baño conmigo y me había sacado de mis pensamientos.

-Sí... esos son. —Señalé el grupo de vestidos que estaba agrupado en el lado izquierdo del armario.

-¿Estás bien, Freen? Pareciera que tenías la mente en otro mundo.

-Algo así, Agamous... algo así.

POV BECKY:
-Mamma, repíteme porque estamos tú y yo en este lugar.

Con mover uno que otro contacto y algo de "Es para la Señora Armstrong" había conseguido que me hicieran espacio para tatuarme.

Me quité la sudadera y la coloqué sobre mi falda.

-Hace un tiempo... tu mamá decidió jugar a ser tatuadora. Ella me hizo unos bonitos diseños. — Le comenté mientras miraba mis brazos.

-Solo tengo éste... — Señalé el tatuaje en honor a mi madre.

-Y creo que me falta algo de tinta, pero con significado. — Le sonreí a Salomé.

-¿Qué te tatuó mamá? Mamá es mala dibujando... aunque los diseños se le dan perfectos.

-Serendipia... y un corazón en mi mano con nuestras iniciales, pero sería muy extremo.

-Definitivamente. Aún no creo que después de vieja te vengas a tatuar.

-Vieja tu ma...-

-Armstrong, puede venir. — El tatuador se acercó y me puse de pie.

Me senté en la silla y suspiré, ya estaba decidido.

-¿Crees que para mañana pueda ir a un evento? Usar vestido sin problemas.

-Tiene un evento... los tatuajes tarda en sanar dependiendo de la personas. Cómo mínimo una semana dependiendo del tatuaje y que tan rápido cicatrice la persona, pero si necesitas salir mañana puedes hacerlo, pero teniendo en cuenta que debes vendar y aplicar una crema para mantenerlos sanos.

-Sé el procedimiento. — Señalé el tatuaje en mi muñeca y él asintió.

-En ese caso, sí... no habría problemas siempre y cuando seas cuidadosa. — Comentó mientras terminaba de acomodar los utensilios.

-Quiero otros tatuajes, si voy a sufrir... sufriré de golpe mejor.

-Creo que no es posible, la cita solo fue para un tatuaje.

-He dicho que quiero otros tatuajes. Si no los haces tú, buscaré alguien más, pero luego de hablar con tu jefe. Siempre he querido comprar un establecimiento para hacer tatuajes. — Comenté esto último mientras miraba alrededor.

-¡Matt! — Engfa, el chico de la recepción se acercó ante el grito de mi tatuador.

-Cancela mis próximas tres citas. — Ordenó.

-No te preocupes, yo pago bien y no te verás afectado.

POV ALE:
Mientras los brazos de Becky eran decorados, Salomé la observaba detenidamente.

Quizás Mamma Blue se había golpeado la cabeza cuando tuvo el accidente... era la idea más coherente para la joven.

Engfa junto a Victoria y Sarah seguían paseando por cada una de las tiendas en el centro comercial siendo seguidas por los guardaespaldas adicionales que ahora eran encargados de cargar algunos bolsos de compras.

Limón y Antonia habían hecho sus compras en Adidas y ahora estaban en una tienda deportiva.

Antonia se había detenido en el área de patinetas y Limón en el área de baseball.

La rubia sostenía un bate de metal entre sus manos mientras se miraba en un espejo colgado de la pared.

-Disculpe, dama. Su celular está sonando. — El empleado encargado de ayudar a Limón no podía ignorar más tiempo sonido del aparato, contrario a Limón que no le había dado importancia.

Limón tomó el celular y lo colocó en su hombro mientras seguía haciendo poses de bateo frente al espejo.

-Mon, ¿por qué no me coges el teléfono? Te he estado llamando.Billy sonaba muy enojado.

-¿Ha ocurrido algo? ¿Cómo está David? — Preguntó la rubia.

-No pasado nada, David está dormido. Te quería informar que lo llevaré a la casa de tu hermana, debo atender mi trabajo.

-Llévalo, allí está la Dama. Me avisas cuando lo hagas, me daré prisas para ir con mi bebé.

-Mon... ¿Estás bien? ¿Estamos bien? — Limón dejó de posar y le pasó el bate al empleado.

-En la noche te voy a llamar. Debemos hablar. Dale besos a mi pequeño.Finalizó la llamada.

-Me llevaré ese bate y esa gorra. —Señaló una gorra que estaba arriba en la vitrina y el empleado asintió.

-¡Tía!

-¡Sofía! — Limón se acercó a su sobrina quién se acercaba deslizándose en una patineta mientras cargaba otra.

-¿Estás lista para irnos? — La pequeña asintió.

La Manada había estado ocupada con sus trabajos.

Baitoey en citas junto a su esposo.

Noey cómo manejadora de Heng lo ayudaba a organizarse para poder ocupar el puesto de la Mini Jefa Blue.

Nam había tenido un pequeño viaje para visitar a su madre y regresaba luego del evento de moda.

Ninguno podía asistir para apoyar a su amiga, pero sus mejores deseos se lo habían saber.

Mientras, Blue se paraba de la silla tras un largo periodo de tortura.

Freen tomaba café con Agamous.

-Entonces, ¿Extras madrugada mañanas y nos vemos allá?

-No, acordé salir a las diez con las hermanas para quedarnos en un hotel cercano al lugar. No queremos estar con prisas.

-Excelente idea, además como durante el día están los preparativos y los ensayos. Es la mejor decisión.

-¿Qué harás tú?

-Madrugaré. — Agamous terminó su café y dejó la taza sobre la mesa.

-¿Y por qué no nos acompañas? Te puedes quedar en el hotel también.

Agamous pareció analizar la idea y tomó la mano de Freen sobre la mesa. Freen lo miró con cautela ante su acto, pero Agamous no hizo nada más, solo dejó la mano sobre la suya.

-Siempre tan astuta, Saro. Tomaré tu palabra, solo debo ir por algo de ropa a mi casa.

-Si quieres ve a tu casa y yo espero a que Becky llegue para que se quede con los niños. Cuando llegue, yo iré a la casa de Irin donde estarán ellas y de ahí nos reunimos.

-También podemos aprovechar el viaje. Me puedes acompañar a casa y luego vamos con las hermanas.

Para los siguientes capítulos la meta será de diez comentarios🤭. Ustedes cumplen lo cumplo😎, los leoooo😎

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