44: ELLAS NO VENDRÁN
Mi cerebro quería explotar. Tenía a mis amigos de vuelta, pero al costo de la posible muerte de una de las Trillizas.
Quería llorar más, pero ya no tenía energias.
Llegamos a la Mansión y por primera vez, la Mansión estaba triste.
-Limón ¿Que ocurrió? — Con la voz entrecortada me atreví a preguntar
-Freen, llegamos a la cabaña. Buscamos habitación por habitación y hayamos a tus amigos. Becky vio algo de lo normal en el lago. Ella salió corriendo y te sacó.
-¿Cómo lo supieron?
-Hicimos qué Non hablara — Suspiro — Freen, solo debías esperar y hubieramos ido por ellos sin dudarlo y preparadas
-Fue mi culpa — Mi estupidez, mi maldita estupidez
-Dama, no. No hiciste nada que una persona con sentimientos no hubiera hecho. Son tus amigos
Debía preguntarle, ella debía saber si fue Uva o BlueBerry quien recibió el disparo.
-¿Quién recibió el disparo?
-Una de mis hermanas — Su mandíbula se tensó.
-¿No me dirás? — La miré a los ojos, sus lágrimas comenzaron a caer.
-Quiero ir al hospital — Cerré la puerta de la camioneta
-Será mejor que no, Freen. Quédate con tus amigos y pídele a Engfa qué te revise, estuviste bajo un lago congelado. Te informaré si algo pasa — Asentí y me bajé sin quitarle la vista a la camioneta mientras se alejaba.
Subí las escaleras para ir directamente a la habitación de Becky, necesitaba su esencia.
Entré y me encontré con Min cuidando a las bebés.
-Señorita ¿se siente bien? — Se paró del asiento y se acercó a mi
-Solo estoy cansada — No le iba a decir que quería morir, qué me sentía la peor persona del mundo y que me odiaba porque por mi culpa una de las Trillizas estaba la vida y la muerte.
-Siéntese, le traeré un té — Me ayudó a sentar frente a las bebés dormidas.
Me paré cuando escuché la puerta cerrarse. Me acerqué a la cama de Becky y tomé la fotografía de las hermanas.
Me estaba volviendo loca y no estaban las hermanas para consolarme a su manera de cada una. Me estaba derrumbando y nadie se iba a dar cuenta.
-Solo debiste esperar, Freen — Me dije.
Pero no esperé ni les avise. Ahora por lo culpa una de ellas había recibido un balazo y la otra, muy probablemente, me odiaba.
La posibilidad de que Uva o Blue muriera dolía.
Uva siendo tan llena de vida y tan alegre. Amaba la vida, amaba vivir los momentos como si fuesen los últimos. Siendo tan aventurera y con tantas ganas de comerse al mundo.
Su sonrisa tan hermosa y llena de energías. Su risa contagiosa y su corazón noble. Sus apuestas de comida y sus planes a futuros.
BlueBerry, mi Becky. Siendo la persona más trabajadora, honrada y preocupada por todos. Tan gentil con cada uno y con esa pasión por la vida que pocos conocían. Su forma de amar a los suyos y querer protegerlos a toda costa.
Su forma de mirarme como si analizarán hasta mi respirar. Como si yo fuese su pase al paraíso. Su forma de expresarse y de actuar. Su forma de amarme a su manera.
-¿Freen? — La voz de Engfa me hizo voltearme.
-¿Que quieres? — Engfa era la última persona que quería ver
-Calma. No sé que te hice para que estés a la defensiva conmigo, Freen — Se sentó en los pies de la cama mirando al peluche — No sé que te hice
-Tienes algo con Becky — Le afirmé
-Alucinas, Freen. Becky para mi es como una hermana. La conozco desde hace años largos al igual que Saint. Crecimos juntos, jamás tendría algo con ella. Sé que ella vale la pena como pareja, pero solo la veo como una hermana — Suspiró y se volteó a verme — Freen, ella te ama. Jamás la vi siendo ella misma con alguien y solo lo ha sido contigo.
Había descubierto un nuevo nivel de estúpidez y el nuevo nivel llevaba mi nombre. Me había enojado con Becky al creer que tenía algo con Engfa, sin pruebas o darle oportunidad a hablar.
-Por mi culpa quizás sea ella quien está entre la vida y la muerte. O por mi culpa me debe estar odiando.
No había un "bien" o un "peor".
Becky no merecía morir y me dolería si fuese Uva quien me odiara.
Uva no merecía morir y me partiría el alma y el corazón si fuese Becky quien me odiara.
Ninguna merecía lo ocurrido.
-Quizás sea Uva, Freen. Es difícil, yo las conozco desde hace mucho a todas y me duele saber que hay una en estado de gravedad. Me duele como no tienes idea.
-Fue mi culpa — Cerré los ojos o hubiera comenzado a llorar.
-Freen, no fuiste tú quien apretó el gatillo. No fue tu culpa.
-¿Que va a ocurrir?
-No tengo idea, Sarocha. En cuanto a sus vacaciones, según el protocolo de la agencia, si ocurre algo extraordinario qué atente contra la seguridad del guía o los turistas...... Según eso, los turistas deben volver a su hogar lo antes posible para preservar la integridad física y emocional de los involucrados.
-¿Debemos marcharnos? — Suspiré para aguantar mis ánimos.
-Si, Sarocha. Deben marcharse, ya A.K. INC no se puede hacer cargo de ustedes — Me estaba derrumbando de tantas qué eran imposibles describirlas.
-Quiero saber que ocurre con ellas — Si debía irme, lo haría, pero quería saber sobre las hermanas
-Haré todo lo posible por informarte si algo ocurre, abajo están los Jeeps esperando por ustedes. Siento todo lo que ha ocurrido, Freen — Se acercó y me abrazó.
-Por favor, informame lo que ocurra — Ella asintió y se marchó.
-Adiós, Armstrongs — Me despedí de la fotografía.
Empaqué mi ropa y pertenencias, una flor azul y las cartas de Becky. Miré sobre la pequeña nevera en la habitación, sabía que estaba mal y que era un robo, pero me daba igual al momento y tomé el objeto sobre ella para guardarlo también.
Me acerqué a las bebés y les dejé un beso en cada una. El pequeño cachorro se acercó a mi y lo cargué.
-Adiós, guapo — Sentí como se me formó un nudo en la garganta y solté al pequeño en el suelo.
Salí de la habitación con mi maleta, dejando atrás mayoría de Becky.
Bajé las escaleras y en el recibidor me esperaban mis amigos con sus maletas.
-Surprise, dile a Min qué los bebés están solos — Le medio sonreí y pasamos la puerta de la entrada. Él estaba anímico, ojos rojos y no nos sonrió como siempre
-Adiós, Mansión A.K — Susurré contra el cristal del Jeep mientras nos alejabamos de la Mansión.
-Los Armstrong son fuertes Freen — Nam me abrazo y yo apoyé mi cabeza sobre su hombro.
-Son las Armstrong — Afirme
El camino al aeropuerto se me hizo eterno, mi corazón acelerado dolía. Dolía cada pulgada de distancia que crecía entre ellas y yo. Dolía saber que era mi culpa, dolía saber que no las volvería a ver. Dolía saber que nunca le dije a Becky qué la amaba, dolía saber que nunca pude darla la revancha a Uva ni la dejé llevarme de aventuras. Dolía saber que una de ellas estaba en estado de gravedad y que la otra me odiaba.
Dolía saber que era el fin de las mejores cosas vendrán y peores vacaciones de mi vida.
-Vamos, Freen. Ellas no vendrían — Nam me abrazó para hacerme caminar hacia la entrada del avión.
Tenía una mínima esperanza de que las tres llegarán. Me estaba engañando a mi misma. Eran unas esperanzas sin sentidos.
El fin de la guerra entre hermanas había acabado. El fin del contrato también. El fin de nosotros en Italia. El fin de la Mini Jefa y yo.
-Vamos — Acepté y entramos.
Tuve que tomarme mi tranquilizante, pero no por mi miedo a los aviones, sino por mi dolor por todo. Me puse mis audífonos y la música comenzó en aleatorio.
Volví a apagar la música cuando mi corazón no aguantó la primera canción. "En esta no - Sin bandera".
Al final, las vacaciones tiene su fin.
Al final, las historias tienen su fin.
Al final, los amores tienen su fin.
Al final, las vidas tienen su fin.
Me senté y cerré los ojos.
Quizás solo quizás, todo había sido un hermoso sueño con final de pesadilla y cuando abriera mis ojos despertaría en mi cama en New York y tendría que alistarme corriendo para ir a desayunar con mis cuatro amigos..
Quizás, nunca había recibido ese mensaje y nunca tuve a Becky a un Click.
Sentí el avión despegar y lo comprendí.
La Trinidad Armstrong ya no aparecía.
Buenas! Nuevo capítulo🥺😭. ¿Quién creen que le hayan disparo? Los leo.
Mis redes sociales:
Instagram:
aleelizabethr3
Twitter:
AlexElizabethR3
Tik Tok:
cachexfreenbeck
Bạn đang đọc truyện trên: ZingTruyen.Store