11: UNA CITA FRÍA
Llegamos al edificio luego de algunas vueltas para distraer a los paparazzis.
-Suppapong, tenemos que tener más control de seguridad. Ellos ya me vieron y deben saber que vivo por el área.
-No te preocupes, Blue, yo me encargo
Subimos todos al apartamento de Freen para comer.
En todo momento, Freen volvió a mantenerse alejada de mi.
"¿Qué quiere ella?..." me cuestioné cuando salí al pequeño balcón para analizar la estructura del mismo.
Aunque ahora estuviera en plan "amigos" igual no desaprovecharía la oportunidad para comprobar que renovación se podría hacer.
"Nuevas barandas de seguridad, cambio de luces, cambio de puerta corrediza...."
-¿Becky? — Freen salio conmigo.
-Dime — Me giré y la vi colocando dos platos de comida sobre la pequeña mesa — ¿Quieres comer con ese frío en el balcón? — Le pregunté.
Claramente a mí no me importaba el frío, pero su nariz roja si me importaba.
-Quiero comer con mi amiga — Dijo con una sonrisa
-Tu amiga no comerá contigo hasta que busques algo que te caliente mejor — Le dije cruzandome de brazos.
-Ya voy, relaja — Dijo con una sonrisa y volvió entrar.
Me senté luego de colocar sobre la silla un pequeño cojin, me encantaba el frío, pero no dejaría que se me congelará el alma.
Miré hacia adentro, Limón estaba entre amigos de Freen. Mon había sido la más fuerte entre la dos en todo este tiempo y verla riendo mientras comía con ellos era algo que necesitaba. Limón dejando a un lado su papel de chica dura y entra refinada para estar, inclusive, hablando con la boca llena de comida.
-Ya volví, ¿Ahora sí puedo comer con mi amiga? — Me preguntó Freen al salir de nuevo. La miré de arriba a abajo. No podía haber un ser más hermoso que ella.
-Ahora sí, Conejita. Ahora sí — Le dije cuando me paré para mover la silla se sentará como toda una dama.
-Grazie — Me dijo con una sonrisa cuando me senté al lado opuesto
-Prego — Le agradecí
-Buon appetito — Dijimos ambas a la vez
-Buon appetito, Freen
Sabía que Freen estaba haciendo algo de esfuerzo por resistir al frío. La temperatura había bajado un poco más de lo normal y si fuéramos dos chicas cuerdas, no estuviéramos comiendo en un balcón a pesar del frío.
Su cabello rebelde por su rostro, esos hermosos ojos de niña tierna, su nariz perfecta y su boca hermosa. Todo acompañado de la capucha de su abrigo la hacían el centro de atención de mis ojos.
-¿Terminaste de comer? — Me preguntó y yo sonreí esperando no haber sido descubierta mirándola
-Sí. La mejor comida rápida en el frío que he tenido — Le dije y ella río negando con su cabeza.
-La mejor cita fría con comida rápida entre amigas — Corrigió.
-La mejor — Acepté y ella terminó de comer.
-¿Qué vas a hacer? — Me preguntó luego de limpiarse la boca con la servilleta y yo fruncí mi ceño — Me refiero a que vas a hacer en general. Supongo que tienes más cosas que hacer en New York a parte de estar en tu nuevo edificio — Aclaró mientras frotaba sus manos para luego intentar calentarse con su aliento caliente.
-Sobre eso..... Justamente mañana tengo una reunión con un inversionista. Luego tengo que volver a aquí para seguir con las citas del resto de inquilinos
-No te atrevas a dar una cita en tu Penthouse — Me dijo sería ¿celos?.
-No se preocupe, igual no creo que BonBon le permita la entrada a alguien más — Ni yo.
-Más le vale a mi sobrino — Dijo y metió sus manos en los bolsillo de su abrigo.
-Freen, podemos entrar. Tienes mucho frío
-No, quiero estar afuera
-No quiero que te congeles aquí — Le dije bromeando y ella sonrió. Bendita sonrisa — Bueno, y tú... ¿Qué harás?
-Mañana tengo universidad, tengo que entregar unos trabajos importantes y luego debo ir a mi trabajo — Dijo y no me resistí
Me paré y la hice de su silla para que se sentara conmigo y poder ayudarlo a calentarse.
-Tu trabajo.... — Recordé la primera vez que la vi trabajando.
FLASHBACK:
-Acaba de salir de la universidad, debe estar pidiendo algo de comer — Me trató de calmar Engfa.
-Lleva como media hora adentro, Engfa. Ni qué hubieran ido a fabricar el aceite para cocina su comida
Estaba comenzando a desesperarme. Estábamos en una camioneta diferente a las Pesadas. Había seguido a Freen al salir de la Universidad hasta que entró a un restaurante en el cual ya llevaba media hora adentro.
-¿Qué quieres hacer?
-Entra, ve que hace ella — Le pedí y comenzó a reír
-Oye, qué acosarla desde el auto es algo raro, pero entrar a ver qué hace en un restaurante no tiene sentido
-Waracha, soy tu jefa. No me niegues
-Yo soy tu amiga. Si quieres saber que hace Freen vas a entrar conmigo — Me dijo mientras se desabrochaba el cinturón
-¿Como pretendes que no sepa que estoy acá si me acerco a ella?
-Soy tu amiga, chófer, cocinera, paño de lágrimas y sobre todo guardaespaldas. Yo sé de esto — Me dijo y me colocó una gorra — Ahora te pones la capucha y me sigues. Deja de solo enviarle hola por mensaje — Me dijo cuando terminó de acomodarse el cabello para que no se me viera.
-Esto no va a resultar — Le dije y ella sonrió mientras me acomodaba su gorra
-Si no funciona..... Trabajo gratis una semana, pero si funciona quiero pago por horas extras durante una semana entera — Me dijo extendiéndome la mano
-Hecho — Estreché nuestras manos y nos bajamos.
-No, yo me voy — Dije cuando intenté dar media vuelta al captar qué estaba a punto de entrar al mismo lugar donde estaba Freen, pero Engfa me sostuvo y arrastró a dentro.
-Si nos sentamos en una mesa central podemos estar atentas a nuestro alrededor y con las personas a nuestro alrededor simplemente seremos dos clientes más — Me explicó antes de sentarnos
Busqué con la mirada a esa mujer que se había dejado crecer el cabello, qué había adelgazado y que tanto deseaba tenerla a centímetros de mi.
-No la veo — Le comentó en voz baja a Engfa, pero está solo miraba su menú.
-¿Estas ciega, Blue? Está allí — Dijo aún sin quitar la mirada de su menú.
Miré hacia todas la mesas con disimulo, pero no la vi.
-Tú, deja de mirar el menú y dime donde esta — Le dije mientras se lo quitaba
-Ciega, es obvio que es la camarera qué entró a la cocina cuando nosotras entramos. Ahora mismo está atendiendo a la familia de la mesa pegada a la ventana al lado de la puerta. A cinco mesas detrás de ti a la derecha de tu posición.
Definitivamente, Engfa merecía un adelanto navideño.
-¿Ahora que hacemos? — Me comenzaba a poner nerviosa. Tenía una Freen a mi espalda
-Tranquila — Engfa levantó y un camarero diferente nos atendió. De reojo pude ver a Freen pasar mientras separaba una hoja de su libreta de pedidos. Un sujeto de levantó de arrepentimiento y Freen chocó con él.
La mano de Engfa sobre mi mano me detuvo casi me paro para ir a ayudarla.
Volví a mi posición y ya Freen estaba entrando a la cocina.
-Vaquera, qué no se te olvide que no quieres que ella sepa de tu presencia, aún — Me recordó mi amiba y yo asentí
-La extraño — Le confesé y comencé a picar en trozos una servilleta.
El camarero llegó con nuestro pedido: camarones picantes y papas fritas.
La puerta de la cocina se volvió a abrir. Joder no podía ser más hermosa. Llevando ese uniforme de camarera, ese delantal ajustado a su cintura, sus gafas de lectura, el cabello recogido y su hermosa sonrisa. Era una mismísima reina cargando una bandeja llena de comida.
-Azul, vamos — Miré a Engfa quién ya tenía en sus manos la lista de comida para llevar.
¿Cuánto tiempo permanecí en mis pensamientos?
-Trabaja, Freen trabaja — Repetí por tercera vez cuando me recosté en mis asiento.
-Sí, Becky. Tu Freen trabaja, es una mujer que sabe valerse por sí sola. Ahora.... ¿Qué canción pondrás?
-Fácil — Busqué mi celular y tras conectarlo la música comenzó a sonar.
FIN DEL FLASHBACK:
-¿Becky? — Freen me llamó la atención mientras chasqueaba sus dedos frente a mi rostro.
-¿Te va bien en el trabajo? — Le preguntó sonriente mientras la abrazaba.
-Sí, es algo cansado, pero todo perfecto — Me enfado
-Si quieres conseguir un empleo mejor
-Nada. Estoy bien como camarera — Me dijo y se recostó de mí
-Hueles divino
-Grazie, ya sabes. Baños constantes — Bromeó y yo le di un besito rápido en la mejilla.
-¿Qué vas a hacer esta noche?
-Seng va a venir — Dijo luego de respirar.
-¿Para que viene ese? — Intenté sonar normal
-No te pongas posesiva. Quiere tener nuestra primera charla sobre la boda
-¡ah! Vale...
-Becky
-Nada, no te preocupes. Somos amigas — Le dije intentando no soanf triste — De hecho pudiera ayudarte con todo. Al fin y al cabo, si no logro nada..... Al menos como amiga sabré que te ayudado a casarte
-Es lo más hipócrita que has dicho — Dijo y yo reí
-Sí, pero igualmente. Te ayudaré si me lo permiten — Hablé siendo sincera
-No creo que sea correcto — Respondió y yo la abracé más a amo
-Muchas cosas no son correctas en la vida
-¡Chicas! ¡Vengano! — Nos llamó Noey
-Dejen ese romance para el privado — Comentó Heng y yo reí cuando Freen le dio un pequeño golpe en su hombro.
-¿Qué ocurre? — Preguntó Freen.
-Ya nos debemos ir. Becky y yo debemos terminar unos documentos para una reunión mañana — Habló Limón
-Cierto, se me había olvidado. Es mejor irnos ya
Nos despedimos todos y salimos.
Esperemos a que el ascensor se abra y cuando la puerta de abra quise devolver lo que me había comido.
-¡Señorita Armstrong y su hermana! — Casi le pego un golpe por el susto cuando gritó
-Señor Seng — Habló Mon volviendo a ser la chica seria
-¿Qué tal? ¿Estaban con Freen? — Nos preguntó con una sonrisa
-Sí, estábamos con la señorita Freen Chankimha
-¿Y que opinan sobre lo de anoche?
"Tremenda porquería, ella es mía"
-Qué fuiste un galán, queda claro
-Oigan, se que no somos amigos, pero ya que estuvo en la pedida.... Tomaré el atrevimiento de invitarlas a la boda — Habló de forma ansiosa
-¿Cuando es la boda? — Hablé por primera vez
-No lo tenemos planeafo aún, pero Freen anda muy ansiosa por casarse. A ella le gustaría en abril — Dijo muy seguro y mi corazón se estrujo.
-Señor Seng, si no tiene seguridad no puede andar invitando — Le dije sería y continúe mi camino.
Llegamos a mi apartamento y tomé a mi hijo en brazos.
-A ese Seng hay que investigarlo — Le dije a Limón cuando entró a la cocina.
-Sí, por supuesto. Mañana tendremos un día pesado, pero apartir de mañana pasado me pondré al cien en la tarea de averiguar sobre ese Wichai
-Mañana será un día pesado — Dije sentándome en una de las sillas del comedor.
-No quiero que te amanezcas en el dieciséis
-Lo que digas hermanita — Dije con una sonrisa.
"Es perfecto en todos los sentidos...." Mi mente comenzó a desviarse al recordarla sobre la mesa, justo donde yo estaba sentado.
-Los cuatro me contaron algo de que necesitabas ayuda de ellos. ¿Qué tienes planeado?
-Nada, solo conquistarla — Dije con una sonrisa y me levanté.
Buenas, buenas!!! Nuevo capítulo🥳. Sigamos con las metas para otro capítulo🤭😎. Ayer fue 25 ahora será 30, haber si llegan rápido😎.
Mis redes sociales:
Instagram:
aleelizabethr3
TWITTER:
AlexElizabethR3
TIK TOK:
cachexfreenbeck
Bạn đang đọc truyện trên: ZingTruyen.Store